Siempre me he preguntado lo mismo: ¿No existirá otra polera con una cara distinta a la del Ché? ¡Y roja más encima! Un color que llama a la revolución, a entregarse con todo. ¿No habrá nadie que represente mejor estas nociones que el Ché? Más aún, cuando la gente sigue creyendo que es cubano y no argentino –el ché-. O sea ni de él saben tanto. Pero se la ponen igual. Yo creo que hoy la sociedad es revolucionaria.
Eso fue lo que me cansó en 3º Medio, y comenzó mi propia revolución. Obvio, contra un mundo que considero no tiene las prioridades puestas en lo verdadero, sino, en lo banal. Claro, en lo banal. Y perdóneme hacer la siguiente comparación, pero se lo voy a demostrar:
¡CREAN EN ESTO!
Esta más preocupado de la polera que se pone para verse bien,
que de hacer el bien.
Está dispuesto a respetar y tolerar al otro,
pero no a amar al prójimo como a uno mismo.
Esta dispuesto a revolucionar su vida y vivir el momento,
en vez de cambiarla, siendo heroicos y radicales.
Esta dispuesto a creer en “Mc Guevara o Ché Donalds”,
antes que creer en Cristo.
Y es lógico. Acaso ¿Qué atractivo tiene creer en un tipo que hizo una verdadera revolución en el mundo hace más de 2000 años atrás? ¡Ninguno!. Es más fácil creer en otro que logró conquistar una isla hace casi 50 años.
El que usaba un arma de fuego y disparaba directo al corazón,
contra el que hablaba y encendía fuego en los corazones.
El que nació en la provincia de Santa Fe,
al que solidificó nuestra Fe.
El que prometió la libertad,
al que nos dio la libertad.
El que murió en Santa Cruz,
al que murió en
1 comentario:
en 3 palabras: NO-TA-BLE
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